Largo mes de mayo. Lleno de trabajo y sobresaltos, de gestación de cambios, de cierre de ciclos, de luz avizorada en este túnel, de futuro. El festival ha exigido mucho esfuerzo, pero ha dado aire. Surgen cosas nuevas y el clima es más benigno. Aparecen los primeros bichitos en el aire y las cerezas ya están a la venta.
Entre otras cosas, este mes he escrito una ponencia (aquí le llaman comunicado, y aunque no es una magistral son buenos 15 minutos) para el Congreso Mujer Arte y Tecnología en la Universidad de Valencia sobre eyeseverywhere y MMX, en inglés y en español. Es una locura, porque aunque el congreso será en noviembre antes de que termine el mes debe de estar todo listo. (por cierto, ayer fue la última entrega de eyeseverywhere bajo el tema Movimientos, Junio inicia con Práctica).
también comencé la página web de Fermín Blanco y a dar clases de conversación en inglés a una chica cuyo padre -gallego- nació en la ciudad de México. Hice otras barquitas y percebes con porcelana, pero lo que se llevó el mes fue Paralelo. Coordinar a varios artistas para que colgaran su obra en los comercios (como estas de Rubén Fenice en la carnicería de Chuz, donde compro mis bisteces alias filetes)
visitar a tod@s y tomarles fotos para el video (que la verdad no me hizo muy feliz), y ya comenzado, estar al pie del cañón todos los sábados. El de ayer fue el más pesado, nos dividimos las acciones y a mi me tocó estar en el mercado de las Conchiñas, en el mismo sitio donde leyeron los poetas, para proyectar la selección de videos y una peli llamada Os Soños do Mar, que habla sbre un pueblo pescador en la Costada Morte llamado Laxe.Por la tarde preparar el terreno para la demostración de graffitti que hizo Pilo, famoso entre la tropa (en la primera foto sus rastas), aderezada por reggae, para correr y marcar la ruta para los gaiteiros de Cecebre. un grupo muy chulo y muy elegante con el que recorrimos la calle Barcelona y otras tantas (y recordé tanto de ese performance de Pilar Albarracín, Viva España, que vi en Venecia...)
al final preparar otra proyección, la callejera. Ahí estuvimos, sentados, a gusto, la noche fresca, una cerveza (sin alcohol), esperando el final. Deteniendo en lo posible el agotamiento que estaba a punto de irrumpir como magma... Se acabó.
este es el video, ustedes juzguen.
2 comentarios:
Me encanta el ritmo y los encadenados, la claridad y simplicidad de los textos, el colorido de las imágenes, la música… En fin, todo.
qué bien, Carlos! gracias por comentarlo!!
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