miércoles, abril 30, 2008

Hoffmann

Ha muerto Albert Hoffman, el químico suizo que, trabajando en Sandoz, descubre el alcaloide del cornezuelo de centeno, lo aisla y da al mundo una de las puertas de la percepción más fáciles de abrir: el ácido lisérgico dietilamida o agente sicotrópico LSD, que puso a viajar -de menos- a toda una generación dentro de su conciencia.
Muchísimas historias dentro de la Historia y de las vidas personales se acompañaron (en pasado, me pregunto?) de esta substancia alteradora de la conciencia, o enteógena.
El cambio que provocó, en conjunto con toda la cultura que sug¡ge de los 60s, tocó todos los terrenos de la cultura y el arte. No podemos separar, auqne¡ue los puritanos y anexas quieran, lo que es este mundo de la sicodelia.
Por algo Don Alberto murió a los 102 años, y sano.

Hay quien viene a este mundo definitivamente a provocar cambios.
cine sobre humo de ...una alucinada, la brasileña Rosangela Renno

2 comentarios:

Joan Guerrero dijo...

Me he de imaginar que este cientifico, siquiera pudo descifrar lo que accidentalmente hubo de cambiar a toda y un sinnúmero de seres humanos con el LSD.

Gracias por darme animos a seguir escribiendo y por saber de mi, en los momentos que nadie, absolutamente nadie, considera en qué rayos está. Vaya mundo.

elizabeth ross dijo...

y si, Joan, dónde andabas? es tan extraño que dejes de bloguear por tanto tiempo. Las campañas electorales? algñun asunto personal? solo espero que estés bien y tus ánimos como siempre. Eres inspirador. te quiero!