Ante la epidemia que nos ha tenido a todos en México, especialmente en el DF, preocupados y hasta confundidos por varios días, quisiera dar un paso atrás, y sacar algunas conclusiones. Aclaro que a estas he llegado tras enfrentar visiones muy encontradas, y en un momento de crisis que naturalmente produce información fluida y cambiante. Aun así, tras consultar con variados epidemiólogos e inmunólogos de la mas alta reputación, escuchar la versión de médicos en hospitales de "choque", así como en hospitales privados exclusivos, y cruzando toda esta información con medios internacionales, tanto del lado político como el científico, he llegado a las siguientes conclusiones.
¿Entonces porque todo el escándalo? Mi análisis me dice que tiene que ver con una serie de reacciones torpes del gobierno, aunadas a un intento de aprovechar políticamente la emergencia. Digamos que es el 11 de septiembre a la mexicana.
Cuando los canadienses primero reportaron casos de turistas volviendo de México que estaban mostrando una influenza atípica, el gobierno mexicano (se pregunta uno que tanto por presión extranjera) sobre-reaccionó. Recordemos que solo días antes se había reportado la muerte "por ataque cardíaco" del Director del Museo de Antropología -Si, el mismo que fue anfitrión de Obama unos días antes-. Eventualmente el gobierno tuvo que aceptar que esta muerte no fue causada por un ataque cardíaco fulminante, sino que era un caso de influenza que se había agravado (y con ello iniciaron todo tipo de especulaciones sobre si México había sido victima de un ataque "bioterrorista"). De ahí todo se disparo como un efecto de bola de nieve.
El gobierno mexicano llamo a una emergencia nacional abrupta, cancelo clases a las once de la noche, e inicio un camino sin vuelta. Con su monopolio de la información de salud del país, y con la complicidad de los medios, toda la información que empezaron a difundir apuntaba a una emergencia de proporciones inauditas. Literalmente estábamos siendo atacados por un enemigo (si le creemos a Televisa, uno que seguro vino de fuera, de EEUU, o peor aun, de China - los sospechosos comunes-) que no solo era inclemente, sino invisible. Era imposible conocer el panorama real, pues todas las fuentes de información estaban controladas, y a final de cuentas, ya habían sido semanas de escuchar extra-oficialmente sobre la epidemia de influenza que había en el país y que el gobierno no aceptaba que existía.
Con la credibilidad destruida, el gobierno primero recibió una reacción por parte de la población de suspicacia e inclusive de mofa. Pero la información parecía confirmar que las cosas eran graves. Surgían mas casos en el resto del mundo, y en todos ellos, eran gente que recientemente había visitado México. Algo pasaba aquí.
Pero ahí seguía esa molesta pregunta de por que aquí seguían acumulándose los muertos cuando en el resto del mundo los casos de infectados se acumulaban sin una sola victima fatal.
El miedo, y con razón, siguió creciendo hasta empezar a vaciar las calles. Hasta los mas cínicos empezaron a preocuparse, y la población entera decidió considerarlos días de guardar.
En mi opinión, también fue aquí donde se les paso la mano. El decreto presidencial, que se paso casi por debajo del agua, sin ningún análisis por parte de los medios (que de todos modos dedicaban el día entero a la misma información sobre como usar tapabocas (el cual por cierto, según varios inmunólogos, es inútil para defendernos de una infección viral-), es tan extremo, y tan claramente alejado de una medida de salud, que ya no hubo vuelta atrás. Era necesario complementarlo con medidas extremas, incluyendo aumentar el periodo de emergencia hasta el 6 de mayo (que convenientemente incluye el 1 de mayo, día pactado para las mas grandes movilizaciones contra el gobierno por muchas organizaciones, así como el aniversario de Atenco, y el 5 de mayo).
Quiero llamar la atención a un periodo de varias horas que se dio durante el sábado, cuando el Presidente se reunió con su Gabinete de Seguridad Nacional. Ese medio día el Secretario de Salud anuncio que las noticias eran buenas pues las acciones habían funcionado, y que en el periodo de contención no había habido un solo muerto nuevo. Unas cuantas horas después, ya acabada la reunión de Seguridad Nacional, el Secretario de Salud salio a anunciar que los casos de muerte habían crecido de 40 a 81. Es decir, de reportar ninguna mortalidad unas horas antes, salio a revelar que este numero se había doblado en unas horas.
Dado el escándalo que causaron internacionalmente las medidas mexicanas, las organizaciones mundiales de salud, incluyendo la OMS y la CDC norteamericana, enviaron a sus expertos a México a tratar de entender que sucedía. El primer efecto inmediato fue un cambio radical en la localización de la enfermedad. De estar concentrada en el DF y EdoMex solamente, pasaron rápidamente a encontrarse casos por todo el país (Si, inclusive en estados panistas). Esto significo que, ya habiendo sobre-reaccionado en el DF, el gobierno estaba obligado a hacer lo mismo en el resto del país. De pronto se cancelo la Feria de San Marcos y, con un lapso de varios días después de hacerlo en el DF, se decidió cancelar clases a nivel nacional.
En mi opinión, estamos claramente ante un caso de: primero, torpeza de reacción ante un problema real, es decir, un brote de influenza inusual y peligroso en un país con tanta pobreza, y que la Secretaria de Salud ni siquiera reconocía hasta que fue alertada por gobiernos extranjeros; dos, una situación de unión y alerta nacional que el gobierno quiso aprovechar para su propia ventaja en un periodo álgido políticamente y pre-electoral; y tres, un "political fallout" en el cual el gobierno no encuentra bien como resolver la salida después de causar tanta afectación a la población, y queriendo pagar el costo político mínimo.
nota sacada de aqui, de Ignacio Madrazo Piña.
actualización: se habla de que en realidad en México se han confirmado solo 7 muertes 7 por influenza..... ver aquí en esta nota de AP via Yahoo y aunque hay enfermos en otros países, no hay muertes confirmadas en ninguno....cuidado con el pánico inducido...
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